Descifrando el árbol filogenético de los Cryptocephalinae
La gran diversidad y distribución mundial de los escarabajos hace que tengan un papel clave en el mantenimiento de los ecosistemas. Sin embargo, y en buena parte debido a su enorme diversidad, hace que nuestro conocimiento sobre esta diversidad y sus relaciones sea muy limitado. De entre los escarabajos Chrysomelidae, un grupo megadiverso con más de 40000 especies descritas, la subfamilia Cryptocephalinae es la cuarta más grande y contiene más de 5300 especies que se distribuyen por todo el mundo. Aunque existen hipótesis sobre su clasificación, no ha sido hasta la investigación llevada a cabo por el Dr. Jesús Gómez-Zurita y su equipo que se ha obtenido un árbol tan completo en lo que a marcadores filogenéticos y taxones se refiere para evaluar y refinar esas hipótesis.
Jesús Gómez-Zurita, anteriormente investigador del Instituto de Biología Evolutiva (IBE) y recientemente incorporado al Instituto Botánico de Barcelona (IBB), y su equipo llevan más de dos décadas recogiendo muestras para este estudio. Recorriendo Europa, América, Oceanía y el sureste asiático, y gracias también a la colaboración de numerosos colegas, han conseguido representar un total de 167 especies de 66 géneros de Cryptocephalinae, es decir, el 52% de los géneros de esta subfamilia.
Para deducir el árbol filogenético de la subfamilia se han analizado cinco marcadores genéticos y los resultados concuerdan con la clasificación aceptada hasta la fecha en cuanto a las tribus Fulcidacini y Clytrini, pero separan la tribu Pachybrachini de Cryptocephalini (hasta ahora considerados en la misma tribu) y crean la tribu Mylassini, divergente de los otros linajes y un posible relicto patagónico de un grupo que una vez fuera más diverso y ampliamente distribuido en la Antártida.
Filogenia de la subfamilia Cryptocephalinae y separación de los principales linajes evolutivos fruto de la fragmentación del megacontinente Gondwana.
Los datos paleontológicos del registro fósil y los biogeográficos que incluían la fecha de una radiación insular, han servido para calibrar un reloj molecular para esta filogenia. De esta manera, el estudio publicado en la revista Zoologica Scripta sitúa el origen de los Cryptocephalinae en el Cretácico temprano hace 116 millones de años en Gondwana. Además, los datos indican que la separación de los linajes evolutivos principales es temporal y geográficamente congruente con la fragmentación de los territorios del megacontinente.
El trabajo de muestreo que ha durado más de 20 años, ha dado sus frutos y los análisis filogenéticos de los especímenes han permitido obtener una herramienta que descifra una pequeña parte, pero importante, del Árbol de la Vida. Asimismo, abre nuevas vías de investigación que pueden arrojar luz sobre los procesos evolutivos de generación de diversidad, así como conocer más sobre la evolución de los Cryptocephalinae y otros coleópteros.
Má información:
Gómez-Zurita, J. & Cardoso, A. 2021. Molecular systematics, higher-rank classification and Gondwanan origins of Cryptocephalinae leaf beetles. Zoologica Scripta 50. DOI: 10.1111/zsc.12501.
