Montjuic: laboratorio de invasiones biológicas

• Las invasiones biológicas son consideradas actualmente una de las principales amenazas en el planeta.
• El estudio reciente de un grupo de investigación del IBB ha identificado cerca de 250 especies de plantas exóticas en la zona montañosa de Montjuic.
• Montjuic contiene una concentración significativa de especies introducidas, y es punto de entrada de muchas especies a Cataluña e incluso a Europa.

A lo largo de los últimos años ha crecido el número de especies invasoras en todo el mundo. Este hecho conlleva una pérdida de biodiversidad a nivel global por su impacto negativo al provocar o agravar la destrucción de hábitats naturales y el desplazamiento o la extinción de especies nativas. Ante un escenario de profundo impacto humano y de un cambio climático más que evidente, las invasiones biológicas se postulan actualmente como una de las principales amenazas para el planeta.

Un estudio reciente liderado por el grupo de investigación XenoPlants del Instituto Botánico de Barcelona, publicado en la revista Plants, ha evidenciado que las áreas urbanas de nuestro país, y también las áreas naturales o las semi-naturales cerca de las áreas urbanas, pueden ser focos para la entrada y establecimiento de especies exóticas. Esta investigación, que ha contado tanto con investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) como del Museo de Ciencias Naturales de Barcelona (MNCB), ha identificado cerca de 250 especies de flora exótica en la montaña de Montjuic, en Barcelona, en un área de poco más de 3 km². Entre estas especies se incluyen algunas de las invasoras más agresivas de la cuenca del Mediterráneo, como, por ejemplo, el ailanto (Ailanthus altissima), que domina ya la vertiente NE de la montaña, o el senecio hiedra (Senecio angulatus).

<<La situación es alarmante>> comenta Neus Ibáñez, primera autora del estudio <<en un área tan reducida se encuentra casi la cuarta parte de toda la flora exótica detectada en Cataluña (32.108 km²) y la octava parte de la del estado español (505.944 km²).>> Por otro lado, Montjuic contiene más especies de plantas exóticas que, por ejemplo, la ciudad de Roma (228 plantas exóticas en 1287 km²).

Las causas que explican la enorme concentración de especies introducidas en Montjuic son múltiples y variadas, pero pueden agruparse en cuatro grandes tipos. La primera causa es el gran número de jardines que salpican la montaña, muchos de ellos construidos con motivo de la exposición universal del año 1929, pero otros mucho más modernos, como el jardín de suculentas Mossèn Costa i Llobera o el Jardín Botánico de Barcelona. Muchas de las plantas que se cultivan se pueden escapar y asilvestrar en lugares próximos. La segunda causa es la proximidad de la montaña a varias vías de entrada accidental de especies exóticas invasoras, especialmente el puerto marítimo y el aeropuerto. La tercera causa es la progresiva antropización de la montaña con la construcción de varias infraestructuras, además de los mencionados jardines, como, por ejemplo, museos, multitud de instalaciones deportivas (muchas construidas a raíz de los Juegos del 92) e, incluso, un parque de atracciones (hoy desmantelado). Hay que destacar el desarrollo del chabolismo en la montaña, con un importante efecto para la introducción de plantas foráneas y que, en su punto más álgido, acogió a una población de más de 50.000 personas a finales de los años 50. Todavía hoy podemos observar restos de antiguos cultivos de subsistencia (árboles frutales como el níspero o el melocotonero, ambos de origen asiático), testigos de aquellos tiempos tan duros. Y, como última causa, hay que mencionar el número de visitantes de la montaña (que se cuentan por varios millones cada año), atraídos por sus museos, conciertos y espectáculos, o, simplemente, por las maravillosas vistas que se obtienen de la ciudad desde la cima de la montaña.

Por todas estas razones, Montjuic no solo es un lugar donde se establecen muchas especies provenientes de territorios de la cercanía, sino que también a menudo ha sido el punto de entrada y expansión de muchas especies en Cataluña e incluso en toda Europa; algunas de las primeras observaciones de plantas exóticas (algunas con carácter invasor) en el continente han sido en la montaña barcelonesa. <<Y este es un proceso que, lejos de detenerse, irá incrementando, en gran parte favorecido por el fuerte impacto humano y los efectos del cambio climático>> afirma Carlos Gómez-Bellver, especialista en flora invasora e investigador del IBB. Montjuic podría considerarse una especie de “laboratorio” natural para las invasiones biológicas y, quizás, un modelo de lo que puede acabar repitiéndose en otras montañas urbanas del área metropolitana, como por ejemplo en el Parc dels Tres Turons o en la misma Collserola.

Tal como explica la investigadora Neus Ibáñez <<una posible medida para la contención y el control de la flora exótica en la montaña de Montjuic sería la implementación de acciones de erradicación de, como mínimo, las especies más invasoras (como por ejemplo el ailanto).>> El ailanto, precisamente, afecta uno de los núcleos dónde en tiempos recientes se ha observado una población de la única palmera nativa de la península ibérica, el palmito o palmera enana (Chamaerops humilis), protegida por ley. Del mismo modo, la expansión de la flora exótica puede llegar a afectar la Succowia balearica, también protegida por ley y muy rara en Cataluña.

Ibáñez, N., Gómez-Bellver, C., Farelo, P., Montserrat, J. M., Pyke, S., Nualart, N., López-Pujol, J. 2023. Montjuïc Hill (Barcelona): A hotspot for plant invasions in a Mediterranean city. Plants, 12(14), 2713. Doi: 10.3390/plants12142713